La freidora de aire se ha convertido en un electrodoméstico popular en muchas cocinas debido a su capacidad para cocinar alimentos de manera más saludable sin sacrificar el sabor y la textura. Sin embargo, no todos los alimentos son adecuados para este tipo de cocción. Conocer las limitaciones de la freidora de aire puede evitar desastres culinarios y mantener tu electrodoméstico en buen estado durante más tiempo.
Aunque la freidora de aire es versátil, hay ciertos ingredientes y alimentos que simplemente no se comportan bien cuando se cocinan en este aparato. Aquí exploramos tres cosas que nunca debes meter en tu freidora de aire y por qué es mejor evitarlo.
FREIDORA DE AIRE: ALIMENTOS CON MUCHO LÍQUIDO
Cualquier alimento que contenga una gran cantidad de líquido, como salsas o sopas, no debe ser introducido en la freidora de aire. Este aparato está diseñado para circular aire caliente alrededor de los alimentos para cocinarlos, y los líquidos pueden causar salpicaduras y derrames dentro del aparato. Esto no solo es un desastre de limpieza, sino que también puede dañar la freidora.
Además, los alimentos empapados en líquidos no se cocinan de manera uniforme en una freidora de aire. La presencia de demasiado líquido puede evitar que los alimentos se doren adecuadamente, resultando en platos con texturas poco atractivas. Por lo tanto, es mejor evitar cualquier cosa que pueda gotear o derramarse durante el proceso de cocción.
QUESOS FRESCOS Y DERRETIDOS
El queso fresco y los quesos que se derriten fácilmente, como el brie o la mozzarella, no son buenos candidatos para la freidora de aire. Cuando estos quesos se calientan, tienden a derretirse rápidamente y pueden crear un gran desorden. El queso derretido puede gotear a través de la cesta de la freidora, provocando que se pegue y sea difícil de limpiar.
Si bien es tentador usar la freidora de aire para hacer aperitivos con queso, es recomendable elegir quesos que mantengan su forma mejor durante la cocción. Los quesos duros, como el parmesano o el cheddar añejo, son más adecuados, ya que no se derriten tan fácilmente y mantienen su estructura.
VERDURAS DE HOJA VERDE
Las verduras de hoja verde, como las espinacas y la col rizada, no deben ser cocinadas en una freidora de aire. Estas verduras son muy ligeras y pueden ser sopladas por el potente ventilador de la freidora, lo que resulta en una cocción desigual y, en el peor de los casos, pueden incluso quemarse.
Además, las hojas verdes no requieren el tipo de cocción que ofrece una freidora de aire. Son más adecuadas para métodos de cocción suaves como el salteado o el vapor. Si realmente deseas usar la freidora de aire para cocinar verduras, es mejor optar por variedades más densas como el brócoli o las coles de Bruselas, que pueden soportar el aire caliente sin volverse un desastre.
MASAS CRUDAS
Las masas crudas, como la de pan o la de galletas, no se cocinan adecuadamente en una freidora de aire. La freidora de aire no proporciona el calor uniforme y constante que estas masas necesitan para elevarse y cocinarse por completo. El resultado suele ser una masa cruda en el centro y quemada en los bordes.
Por otro lado, intentar cocinar masas crudas en la freidora de aire puede causar que se peguen a la cesta y sean difíciles de quitar. Es mucho mejor utilizar un horno convencional para este tipo de preparaciones, donde el calor puede ser distribuido de manera uniforme y controlada, asegurando un resultado perfecto.