El síndrome del colon irritable (SII) es un trastorno común que afecta al sistema digestivo, provocando síntomas como dolor abdominal, hinchazón, diarrea y estreñimiento. Aunque la causa exacta del SII sigue siendo desconocida, la alimentación juega un papel crucial en la gestión de los síntomas.
Identificar y evitar ciertos alimentos puede marcar una gran diferencia en cómo se siente una persona afectada por este trastorno. Aquí exploraremos cinco alimentos que comúnmente se recomienda evitar para reducir los síntomas del SII.
COLON IRRITABLE: PRODUCTOS LÁCTEOS Y ALIMENTOS GRASOS
Los productos lácteos, especialmente aquellos ricos en lactosa, pueden ser problemáticos para muchas personas con SII. La lactosa es un azúcar que, en algunos individuos, no se digiere correctamente debido a la falta de la enzima lactasa. Esto puede resultar en síntomas como gas, hinchazón y diarrea. Optar por productos lácteos sin lactosa o alternativas vegetales como la leche de almendra o soja puede ser una solución efectiva.
Las comidas altamente grasosas pueden exacerbar los síntomas del SII, ya que estimulan contracciones intensas en el colon. Alimentos como la comida rápida, cortes de carne muy grasos y frituras deben ser consumidos con moderación o evitados. Elegir métodos de cocción más saludables como al vapor, al horno o a la plancha, y preferir cortes de carne más magros puede ayudar a controlar los síntomas.
FRUCTOSA Y LEGUMBRES
La fructosa es un tipo de azúcar que se encuentra en muchas frutas y también se usa como edulcorante en numerosos productos procesados. Algunas personas con SII pueden tener dificultades para absorber la fructosa, lo que provoca síntomas como hinchazón, gas y diarrea. Limitar el consumo de frutas con alto contenido de fructosa como manzanas y peras, y evitar bebidas y alimentos que contengan jarabe de maíz de alta fructosa, puede ser beneficioso.
Aunque son nutritivas, las legumbres como frijoles, lentejas y garbanzos pueden provocar gas e hinchazón en personas con SII debido a su alto contenido de fibra y oligosacáridos. La preparación adecuada de las legumbres, incluyendo remojarlas y cocinarlas bien, puede ayudar a reducir estos efectos. También es posible introducir pequeñas cantidades gradualmente en la dieta para permitir que el sistema digestivo se adapte.
EDULCORANTES ARTIFICIALES
Los edulcorantes artificiales como el sorbitol y el manitol se encuentran a menudo en chicles y dulces «sin azúcar». Estos edulcorantes pueden causar diarrea en algunas personas, especialmente aquellos con SII, porque el cuerpo no los absorbe bien. Es recomendable leer las etiquetas de los productos para evitar estos aditivos y optar por alternativas naturales como la stevia o simplemente reducir el consumo de dulces.
Evitar estos alimentos puede no eliminar completamente los síntomas del SII, pero puede significar una gran mejora en la calidad de vida de quienes padecen este trastorno. Siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en la dieta.
