La agresión en perros puede ser un tema muy desagradable para los dueños de mascotas que se ven inmersos en esta situación. Esto puede incluir desde un pequeño ladrido hasta un latido letal, es algo de temor incluso para los dueños más experimentados. Lo que es peor, los perros a menudo no reciben la atención que necesitan por el temor o el desconocimiento de cómo encarar el problema de forma adecuada.
Lo cierto es que un dueño de un perro con actitudes agresivas necesita conocimiento y comprensión de las causas subyacentes a estos comportamientos para poder abordarlos de forma adecuada. Aunque la agresión en perros no es algo que pueda repararse de la noche a la mañana, el entendimiento, el tiempo y los recursos adecuados pueden conducir a importantes cambios en el comportamiento de un can que es propenso a actitudes agresivas.
Tipos comunes de agresiones en perros
Las actitudes agresivas en perros pueden manifestarse en diferentes formas. Está la agresión protectora, que surge cuando el perro está tratando de protegerse o algo que considera su propiedad. Esta incluye ladridos, gruñidos y mordeduras.
La agresión territorial ocurre cuando un perro está tratando de defender su territorio; los gruñidos, la exposición de los dientes y toda la conducta relacionada con la agresión son partes de esto. También está el juego agresivo, que generalmente ocurre entre perros de la misma edad o entrenamiento; sin embargo, puede no ser aceptado entre los humanos. Los perros que muestran agresión hacia otros canes pueden ser llamados agresores o intimidadores, especialmente si su comportamiento es muy catastrófico.
Los perros también desarrollan la agresión como una reacción a un estímulo. Esto puede ser un sonido fuerte o un movimiento repentino, aunque a veces los propietarios no son conscientes de esta causa. A menudo, un perro sufre de trauma por haber experimentado algo aterrador en el pasado. Esto puede provocar que los perros sean reacios a la multitud, a la gente desconocida o incluso a otro tipo de animales. Esta dependencia puede ser difícil de tratar y los perros podrían actuar con agresión por un ambiente desconocido.
Prevención de la agresión
En primer lugar, hay muchas cosas que los propietarios pueden hacer para prevenir la agresión en sus perros. Esto incluye establecer unas normas y límites claros en cuanto al comportamiento de su perro. Esto significa que es importante ser consistente y establecer un lenguaje de señas claras para demostrar a su perro qué es aceptable y qué no lo es. Establecer una jerarquía entre el perro y el propietario le ayudará a entender mejor sus límites. Cuando un perro sabe qué actitudes están permitidas, es menos propenso a reaccionar de forma agresiva.
Además de eso, los propietarios tienen que hacer que su mascota sea consciente de sus entornos. Deben prestar atención a los comportamientos de su perro cuando están en público o alrededor de otros perros. Reacciones como el gruñido, el chasquido de la cola y el ladrido excesivo pueden ser signos de que el perro está siendo agresivo. Se debe actuar rápidamente para calmar al animal y evitar que el comportamiento empeore.
También es importante hacer que un perro socialice con otros animales y personas. Esto ayudará a que el animal sea menos propenso a prejuicios o miedo hacia los desconocidos. Los propietarios también pueden suscribirse a un programa de obediencia para asegurarse de que su perro está respondiendo a los comandos de manera apropiada y acatando las normas del hogar.
Entrenamiento de conducta
El entrenamiento de comportamiento se ha vuelto cada vez más popular para tratar la agresión en perros. Los entrenadores suelen recomendar el entrenamiento positivo, es decir, el adiestramiento que enfatiza los refuerzos y evita los castigos. Esta técnica presupone que los perros aprenden mejor con recompensas y alabanzas.
Esto significa que, cuando un perro realiza un comportamiento correcto, el propietario proporciona una recompensa como un bocadillo o juego. Esta técnica mejora la comunicación mutua entre el propietario y su perro.
Además de esto, el adiestramiento de comportamiento también ayuda a los perros a desarrollar habilidades sociales y habilidades de liderazgo. Esto es esencial para controlar la agresión en el futuro. Los entrenadores de perros a menudo utilizan técnicas de condicionamiento para ayudar
a los perros a aprender los comportamientos que son aceptables y aquellos que no lo son. Al aprender lo que se espera de ellos, los perros son menos propensos a reaccionar con agresión cuando se encuentran en situaciones desconocidas.
Tratamiento farmacológico
En algunos casos, la agresión grave en los perros puede requerir tratamiento farmacológico. Los propietarios deberían consultar con un veterinario para determinar si hay algún tratamiento farmacológico adecuado para su mascota.
Estos medicamentos pueden mejorar la conducta y reducir la ansiedad, lo que ayuda a prevenir la agresión grave en el futuro. Algunos de estos fármacos son antidepresivos o Ansiolíticos. También pueden ayudar a reducir el nivel de estrés y ansiedad.
Sin embargo, estos medicamentos también pueden tener efectos secundarios negativos. Por esta razón, los propietarios necesitan consultar con un veterinario antes de tomar la decisión de usar cualquier medicamento para tratar la agresión de un perro. Un veterinario podrá ayudar a los propietarios a determinar la mejor manera de abordar el problema en lugar de usar medicamentos.
Comprender el comportamiento del perro
Los propietarios de más mascotas deben estar conscientes de que se requiere tiempo, paciencia y entendimiento para abordar los comportamientos agresivos en sus perros. Esto requiere un nivel de interpretación y comprensión de sus mascotas que es especialmente importante cuando hay problemas más graves. Esto significa que los propietarios deben estar dispuestos a trabajar para entender por qué su perro está mostrando signos de agresión y tratar de abordar las causas subyacentes a estos comportamientos.
Para comprender el comportamiento de su perro, los propietarios necesitan prestar atención a cómo su mascota reacciona a diferentes situaciones. Esto requiere algo de vigilancia para determinar cuándo es más propenso a actuar con agresión. Además, los propietarios también deben estar conscientes de las señales de advertencia de su perro, como gruñidos, aullidos, movimientos de la cola y otros gestos. Esto puede ayudar a los propietarios a comprender la motivación detrás de las reacciones agresivas de su perro.
Obtener ayuda profesional
Los propietarios que tienen problemas con la agresión de su perro también deberían considerar la posibilidad de obtener ayuda profesional. Si bien hay muchos recursos disponibles para tratar la conducta agresiva de los perros en casa, existen también entrenadores especializados en esta área que pueden ayudar a los propietarios a tratar los problemas de agresión en su mascota.
Un entrenador calificado tendrá la experiencia y los conocimientos necesarios para tratar la agresión grave en los perros. Los entrenadores también pueden evaluar el comportamiento del perro y trabajar con él para tratar los problemas de conducta. También pueden ayudar a los propietarios a comprender mejor la motivación que hay detrás de los comportamientos agresivos de perro y a mejorar la comunicación entre ellos y su mascota.