Con el objetivo de obtener una mejor salud y una alimentación más equilibrada, es esencial cambiar hábitos alimenticios por otros que contribuyan a mejorar la calidad de vida. Para ello, el consumo de frutas y verduras debe ser uno de los principales.
Estos componen una parte fundamental en nuestra dieta, ya que son ricos en las vitaminas necesarias para nuestro cuerpo. La nutrición equilibrada asegura un mejor estado de salud, pues ayuda a prevenir futuras enfermedades.
Eligiendo las frutas y verduras correctas
Es importante considerar las diferentes temporadas para fomentar el consumo de alimentos variados, refrescantes y saludables. Se recomienda comer al menos cinco porciones de frutas y verduras al día. Puedes elegir entre sus variedades de temporada o aquellas cuyo precio resulte un poco más económico. También se debe tener en cuenta la procedencia de los alimentos, optando por aquellos que sean de producción local y orgánica.
Comprar frutas y verduras de producción orgánica es una gran decisión: los alimentos orgánicos son más nutritivos y no contienen productos químicos. Además, no contienen ningún pesticida tóxico añadido para hacerlos más resistentes a los insectos, ayudando a preservar el medio ambiente.
Por otro lado, es recomendable evitar la presencia de agroquímicos porque pueden afectar el sistema inmune y alterar el desarrollo de distintas partes del cuerpo. Estas son algunas razones por las que los alimentos orgánicos tienen un mayor valor nutritivo.
Por último, un consejo para comprar productos de mayor calidad: opta por aquellos que presenten un color intenso, sean de tamaño medio y estén en un estado fresco. Estas características indican que la fruta y verdura se encuentran en óptimas condiciones, lo que permite alcanzar una nutrición equilibrada.