El aceite de oliva extra virgen se ha convertido en uno de los alimentos más preciados en la dieta mediterránea, vale decir, uno de los súper alimentos más saludables. Sin embargo, el aceite de oliva se puede utilizar para mucho más que solo añadir un intenso sabor a las comidas. En la cosmética y la medicina natural, el aceite de oliva extra virgen es uno de los ingredientes más importantes, debido a su alto contenido de antioxidantes y ácidos grasos esenciales.
Por ejemplo, es un ingrediente clave en muchos productos de limpieza para la piel, como la crema hidratante, tónicos y exfoliantes. Esto se debe a sus propiedades regenerativas, protectoras y antiinflamatorias que ayudan a combatir el envejecimiento prematuro de la piel, la prevención de manchas y la protección de la piel frente a los rayos UV.
Los beneficios del aceite de oliva para el cuidado de la piel
El aceite de oliva es uno de los productos más antiguos y usados en el mundo. Esta sustancia, obtenida de la aceituna, es uno de los mejores aliados para el cuidado de la piel. Contiene vitaminas A, E y antioxidantes que ayudan a mantener la piel hidratada y a prevenir el envejecimiento prematuro. Además, también ayuda a reducir la inflamación y el enrojecimiento de la piel.
Los aceites esenciales contenidos en él también son muy beneficiosos para la piel. Estos aceites ayudan a limpiar la piel, a eliminar las células muertas y a reducir la aparición de arrugas. También contribuyen a mejorar la circulación sanguínea y a mantener la piel suave y tersa.
Por último, también es un excelente humectante para la piel. Esta sustancia ayuda a mantener la piel hidratada y a prevenir la resequedad. Esto es especialmente útil para las personas con piel seca, ya que ayuda a reponer los lípidos necesarios para mantener la piel suave y saludable.
