El insomnio es un trastorno del sueño que afecta a millones de personas en todo el mundo. Con la llegada del otoño, un cambio significativo en las condiciones climáticas y en la luz del día puede influir en nuestro ciclo de sueño, empeorando la calidad del descanso. La disminución de la luz solar puede alterar nuestros ritmos biológicos, llevando a problemas como el insomnio.
Sin embargo, mediante la creación de un ambiente propicio para dormir, es posible mitigar estos efectos y mejorar la calidad del sueño.
4La importancia de la oscuridad
La oscuridad es un elemento crucial para un sueño reparador. Durante el otoño, las noches llegan más temprano, lo que nos da la oportunidad de aprovechar la oscuridad para dormir. Sin embargo, muchas personas todavía tienen luz artificial en sus dormitorios que puede interferir con el sueño.
Cortinas opacas o persianas son excelentes para bloquear la luz exterior, creando un ambiente oscuro y tranquilo. Además, también puedes considerar el uso de máscaras para los ojos o dispositivos de reducción de luz mientras duermes.
Es fundamental que tu espacio de descanso sea un refugio tranquilo, lo que te ayudará a experimentar un sueño más profundo y reparador. Además, un ambiente oscuro contribuye a la producción de melatonina, lo que a su vez promueve un mejor descanso.