La migraña es un trastorno neurológico que afecta a millones de personas en todo el mundo. La combinación de factores desencadenantes, como el estrés, la falta de sueño, la dieta y, por supuesto, el clima, puede influir en la frecuencia y severidad de estas crisis.
4Cambios en el sueño y la migraña
La calidad del sueño es otro factor que puede verse afectado por el calor del verano. Las altas temperaturas y la humedad pueden dificultar el sueño reparador, lo que puede agravar las crisis de migraña.
- Efecto del calor en el sueño
El calor extremo puede interrumpir los patrones de sueño. Las noches calurosas del verano pueden provocar insomnio o un sueño de mala calidad. Si no se descansa adecuadamente, esto puede llevar a cambios en la química cerebral que favorecen el desarrollo de migrañas.
- Estrategias para dormir mejor
Mantener una habitación fresca y oscura, utilizar ventiladores o aires acondicionados, y establecer rutinas de relajación antes de acostarse son estrategias que pueden ayudar a mejorar el sueño. También se pueden usar técnicas de respiración y meditación para crear un ambiente propicio para un buen descanso.