Pasar de los 50 años no significa que la actividad física deba quedar en el pasado. De hecho, es fundamental para mantener una buena salud física y mental, especialmente si llevas una vida predominantemente sedentaria. Si eres de las que has estado acostumbrada a un estilo de vida más tranquilo, la idea de comenzar a hacer ejercicio puede parecer abrumadora.
Pero no te preocupes, no necesitas convertirte en una atleta de élite. Con un plan adecuado y una actitud positiva, puedes incorporar el ejercicio a tu vida y disfrutar de sus numerosos beneficios.
4Busca un compañero de entrenamiento
Entrenar con un compañero puede ayudarte a mantener la motivación y la constancia. Además, es más divertido hacer ejercicio con alguien que comparte tus intereses. Busca un amigo, un familiar o un grupo de entrenamiento que se adapte a tu ritmo y a tus objetivos.
La recomendación general es hacer al menos 150 minutos de ejercicio aeróbico de intensidad moderada o 75 minutos de ejercicio aeróbico de intensidad vigorosa a la semana.
Se recomienda realizar ejercicios de fortalecimiento muscular al menos dos días a la semana.
Para las mujeres de más de 50 años que llevan una vida sedentaria, es aconsejable comenzar con sesiones cortas de ejercicio de baja intensidad, aumentando gradualmente la duración y la intensidad a medida que ganas fuerza y resistencia.