En la actualidad, los cigarrillos electrónicos han ganado popularidad como una alternativa a los cigarrillos tradicionales. Se comercializan como una forma más segura de satisfacer los deseos de nicotina, prometiendo una experiencia de vapeo sin los efectos nocivos del humo de tabaco.
Sin embargo, la investigación sobre los efectos a largo plazo del vapeo aún es limitada y los estudios recientes están revelando una realidad más preocupante sobre su impacto en la salud, particularmente en la salud de las encías.
Los cigarrillos electrónicos, a pesar de no quemar tabaco, liberan un aerosol que contiene nicotina, glicerina, propilenglicol y otras sustancias químicas. Estos componentes pueden afectar la salud oral de diversas formas, incluyendo la irritación de las encías, la disminución de la circulación sanguínea en la boca y el aumento del riesgo de desarrollar enfermedades periodontales.
1Nicotina: el combustible de la destrucción
La nicotina es una sustancia altamente adictiva que se encuentra en los cigarrillos electrónicos y tradicionales. Su consumo tiene un impacto directo en la salud de las encías debido a su capacidad para constreñir los vasos sanguíneos.
Esta vasoconstricción reduce el flujo sanguíneo a las encías, privándolas de los nutrientes esenciales para su buen funcionamiento y su capacidad de regeneración.
La disminución de la circulación sanguínea también dificulta el transporte de oxígeno a las células de las encías, debilitando su resistencia ante las infecciones.
Además, la nicotina es un potente irritante para las encías. Su contacto directo con las encías puede provocar inflamación, enrojecimiento, dolor y sensibilidad. Esta irritación constante puede contribuir a la formación de placa bacteriana y al desarrollo de gingivitis, la primera etapa de la enfermedad periodontal.
El consumo de nicotina, sea a través del vapeo o de cigarrillos tradicionales, crea un ambiente propicio para el desarrollo de enfermedades periodontales.
El flujo sanguíneo reducido, la inflamación crónica y el debilitamiento de las encías debilitan la defensa natural del cuerpo contra las bacterias, aumentando el riesgo de infección y pérdida de hueso que sustenta los dientes.