La menopausia es una etapa natural en la vida de la mujer que suele empezar entre los 45 y 55 años, marcando el final de su ciclo reproductivo. Esta fase viene acompañada de una serie de cambios físicos y emocionales, muchos de los cuales son bien conocidos, como los sofocos, las alteraciones del sueño y los cambios de humor.
Sin embargo, uno de los riesgos menos visibles y a menudo ignorados durante esta transición es el aumento de los niveles de colesterol.
2La menopausia y su impacto hormonal
Durante la menopausia, los ovarios reducen la producción de hormonas como el estrógeno y la progesterona.
Este cambio hormonal tiene múltiples efectos en el cuerpo. Uno de ellos es que el estrógeno ejerce un efecto protector sobre el colesterol, ayudando a mantener los niveles de LDL bajo control y fomentando un aumento en los niveles de HDL.
Por lo tanto, la disminución de los niveles de estrógeno durante la menopausia puede contribuir al aumento del colesterol LDL y a la disminución del HDL.