El bronceado es uno de los aspectos más deseados del verano, simbolizando no solo una estética favorecedora, sino también el tiempo al aire libre y la alegría del sol. Sin embargo, mantener ese tono dorado y luminoso que tanto anhelamos puede ser un desafío una vez que las temperaturas comienzan a bajar. Afortunadamente, existe un aliado natural que no solo puede ayudar a prolongar el bronceado, sino que también ofrece múltiples beneficios para la piel: el aceite de oliva.
3Cómo usar aceite de oliva para mantener el bronceado
El aceite de oliva se puede utilizar de diversas formas para beneficiar el bronceado de la piel. Aquí hay algunas maneras prácticas de incorporarlo a tu rutina de cuidado de la piel:
- Como humectante
Aplicar aceite de oliva como humectante después de un baño o ducha ayuda a sellar la hidratación en la piel. Aún mejor, puedes mezclarlo con unas gotas de aceites esenciales para potenciar sus propiedades. Este método es ideal para mantener la piel flexible y evitar que se reseque, lo que a menudo provoca la pérdida del bronceado.
- Como aceite bronceador
Si bien es importante recordar que el aceite de oliva no proporciona protección solar, muchas personas lo utilizan como aceite bronceador natural. Puede ayudar a histerizar la piel durante la exposición al sol, lo que puede contribuir a obtener un bronceado uniforme y duradero. Es fundamental complementarlo con un bloqueador solar adecuado para proteger la piel de los efectos dañinos del sol.