Comer antes de acostarse es una práctica común para muchas personas, ya sea porque se sienten hambrientas o simplemente porque han tenido un día ajetreado. Sin embargo, esta costumbre puede acarrear varios riesgos para la salud.
En este artículo, exploraremos en profundidad por qué comer antes de dormir puede tener consecuencias negativas en tu organismo, así como algunas recomendaciones para mitigar los efectos indeseados.
9Complicaciones metabólicas
Los problemas metabólicos pueden ser el resultado de comer antes de acostarse, especialmente si esto se convierte en un patrón regular. La ingesta calórica excesiva puede llevar a una disminución de la tasa metabólica, lo que puede resultar en un incremento de la grasa corporal.
Además, el metabolismo se ve afectado negativamente por la falta de sueño. Un sueño adecuado es fundamental para la recuperación y la regulación del metabolismo; por lo tanto, si se come antes de acostarse, las oportunidades para que el cuerpo realice estas funciones se ven comprometidas.