El verano, con su calor abrasador y sus días largos, invita a disfrutar de la playa, la piscina y las actividades al aire libre. Sin embargo, para muchos, esta época del año también trae consigo una incomodidad recurrente: la hinchazón de los pies.
Esta sensación de pesadez y presión en los pies, que puede afectar la movilidad y el bienestar, es un síntoma común en los meses más calurosos.
Las altas temperaturas, la deshidratación y la mayor actividad física, junto con factores como el embarazo o la obesidad, pueden contribuir a la aparición de la hinchazón en los pies. Afortunadamente, existen diversas medidas que podemos tomar para combatirla y recuperar la comodidad en nuestros pies.
4La obesidad: un factor de riesgo para la hinchazón
La obesidad también puede aumentar la probabilidad de hinchazón de pies, especialmente en verano. El exceso de peso corporal pone más presión en las venas y los vasos sanguíneos de las piernas y los pies, lo que puede afectar el retorno venoso y contribuir a la acumulación de líquidos en los tejidos.
Además, la obesidad también puede afectar la circulación sanguínea, lo que puede empeorar la hinchazón. Es importante recordar que perder peso, incluso una pequeña cantidad, puede ayudar a aliviar la hinchazón de pies y a mejorar la salud en general.