El turismo frenético se ha vuelto cada vez más común en la sociedad actual, caracterizado por la necesidad de visitar múltiples destinos en un corto periodo de tiempo y llenar el itinerario con actividades en todo momento.
Aunque viajar puede ser una experiencia enriquecedora y emocionante, el turismo frenético puede tener efectos negativos en la salud mental y física de las personas.
9Aprender a decir no
Para combatir el turismo frenético, es importante aprender a decir no a actividades y experiencias que no nos aporten valor o que nos generen estrés. En lugar de sentir la presión por cumplir con un itinerario abarrotado de actividades, es importante escuchar nuestras necesidades y priorizar nuestro bienestar emocional y físico.
Al aprender a decir no a actividades que no nos aporten valor, podemos liberar tiempo y energía para disfrutar de experiencias significativas y enriquecedoras durante el viaje. Esto nos permitirá disfrutar de un turismo más saludable y relajante, donde podamos conectar con el entorno y con nosotros mismos de forma consciente y plena.