El turismo frenético se ha vuelto cada vez más común en la sociedad actual, caracterizado por la necesidad de visitar múltiples destinos en un corto periodo de tiempo y llenar el itinerario con actividades en todo momento.
Aunque viajar puede ser una experiencia enriquecedora y emocionante, el turismo frenético puede tener efectos negativos en la salud mental y física de las personas.
7Conectar con la naturaleza
Una forma eficaz de combatir el turismo frenético es conectar con la naturaleza durante el viaje. La naturaleza tiene un efecto calmante y terapéutico en el cuerpo y la mente, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad.
Por ello, es recomendable incluir actividades al aire libre en el itinerario, como senderismo, paseos en bicicleta, kayak o simplemente disfrutar de un picnic en un parque.
Además, la conexión con la naturaleza permite apreciar la belleza del entorno y disfrutar de momentos de tranquilidad y paz.
Esto puede ayudar a desconectar de la rutina diaria, del bullicio de la ciudad y de la presión por cumplir con un itinerario abarrotado, y a disfrutar plenamente del momento presente y de la belleza del mundo que nos rodea.