La caspa es un problema común del cuero cabelludo que puede resultar molesto y embarazoso. Aunque existen múltiples causas para su aparición, la forma en que nos lavamos el pelo puede influir significativamente en la prevención de la caspa.
2Ajusta la temperatura del agua: evita el agua muy caliente o muy fría
El agua extremadamente caliente puede resecar el cuero cabelludo y empeorar la caspa, mientras que el agua fría puede no ser lo suficientemente efectiva para eliminar la grasa y las impurezas.
Opta por agua tibia o templada al lavar tu cabello, ya que esta temperatura es ideal para limpiar el cuero cabelludo sin causar irritación ni desequilibrios en la hidratación. Masajea suavemente el cuero cabelludo con agua tibia para estimular la circulación sanguínea y promover la salud capilar.