El agua es esencial para mantenernos hidratados y saludables, especialmente en climas calurosos donde la deshidratación es un riesgo constante. Sin embargo, beber agua extremadamente fría en momentos de calor intenso puede tener efectos negativos en nuestro cuerpo.
Aunque pueda resultar refrescante y tentador, el consumo excesivo de agua fría puede desencadenar una serie de problemas de salud que debemos tener en cuenta.
5Riesgo de agravar la sensibilidad dental: cómo el agua fría puede dañar los dientes
El agua fría puede ser perjudicial para los dientes y las encías, especialmente si se consume en exceso. El choque térmico causado por el agua fría puede provocar sensibilidad dental en personas con problemas dentales preexistentes o encías sensibles.
Además, beber agua extremadamente fría de forma habitual puede desgastar el esmalte dental y aumentar el riesgo de caries y sensibilidad dental.
Para proteger la salud dental, es recomendable consumir agua a temperatura ambiente o ligeramente fresca y evitar el consumo excesivo de agua fría.