La anemia por deficiencia de hierro es un trastorno común caracterizado por una disminución en los niveles de hemoglobina en la sangre. Esta condición, si no se trata a tiempo, puede ser potencialmente fatal, especialmente en los bebés y los niños pequeños. Estudios recientes sugieren que la prevalencia de la anemia por deficiencia de hierro es particularmente alta en muchos países. Aunque se ha avanzado en el tratamiento de la anemia por deficiencia de hierro, todavía hay muchas personas que no comprenden esta enfermedad y cómo puede afectar su salud.
En este artículo examinaremos las causas, síntomas y formas de aumentar los niveles de hierro en el cuerpo para prevenir y tratar la anemia por deficiencia de hierro.
Índice
¿Qué es la anemia por deficiencia de hierro?
La anemia por deficiencia de hierro es un trastorno en el que los niveles de habitualmente altos de hemoglobina en la sangre caen a niveles que son demasiado bajos para mantener la salud. Esta disminución en los niveles de hemoglobina significa que los glóbulos rojos no están transportando suficiente oxígeno a los órganos y tejidos del cuerpo. La falta de oxígeno en el cuerpo puede afectar negativamente el rendimiento intelectual, físico, y la energía generalmente.
La anemia por deficiencia de hierro se diagnostica a partir de un análisis de sangre, que muestra que los niveles de hemoglobina son inferiores a los niveles normales. La anemia por deficiencia de hierro puede ocurrir en cualquier grupo de edad, aunque es particularmente frecuente entre los bebés y los niños en crecimiento. Aquellos en los que sufren de una dieta pobre y la malnutrición son especialmente vulnerables.
Causas de la anemia por deficiencia de hierro
La anemia por deficiencia de hierro puede haber una variedad de causas. La causa más común de anemia por deficiencia de hierro es una ingesta insuficiente de hierro en la dieta. El hierro se absorbe de los alimentos y luego se transporta a los órganos del cuerpo donde se almacena en el hígado y la médula ósea para su posterior uso. Si la ingestión de hierro no es suficiente, entonces los niveles de hemoglobina presentes en la sangre son bajos.
Otra causa común de anemia por deficiencia de hierro es la pérdida excesiva de sangre. Esto puede ser el resultado de una cirugía, el uso de medicamentos para la enfermedad cardiaca o una lesión. La pérdida crónica de sangre puede acabar con los niveles de hierro y luego con los niveles de hemoglobina.
Finalmente, algunas personas pueden tener una condición conocida como malabsorción en la que el cuerpo no absorbe correctamente el hierro de los alimentos. Esto a menudo resulta en una ingesta insuficiente de hierro y una falta de niveles de hierro en el cuerpo.
Síntomas de la anemia por deficiencia de hierro
Los síntomas exactos de la anemia por deficiencia de hierro varían de persona a persona, dependiendo de la gravedad de la afección. Los síntomas más comunes incluyen fatiga, falta de energía, palidez, dificultad para respirar, dolor de cabeza, debilidad y falta de concentración. Estos síntomas pueden ser similares a los de otras formas de anemia, por lo que es importante consultar a un médico para un diagnóstico preciso.
Los bebés y los niños pequeños pueden exhibir síntomas diferentes de los adultos. Esto incluye irritabilidad, llanto, apetito reducido, problemas para alimentarse o respirar, pérdida de movimiento del brazo o de la pierna o dificultad para respirar. Por esta razón, es importante realizar análisis regulares de sangre en los bebés y los niños para detectar a tiempo la anemia por deficiencia de hierro.
Cómo aumentar los niveles de hierro para prevenir y tratar la anemia por deficiencia de hierro
La mejor forma de prevenir y tratar la anemia por deficiencia de hierro es aumentar los niveles de hierro en el cuerpo. Existen varias formas de hacer esto, comenzando con la ingesta de alimentos ricos en hierro y suplementos dietéticos o medicamentos recetados si es necesario.
Los alimentos ricos en hierro incluyen carne roja, mariscos, lentejas, huevo, frijoles, verduras de hojas verdes, maní y nueces. También es importante incluir una buena fuente de vitamina C, ya que ayuda al cuerpo a absorber el hierro. Las fuentes de vitamina C incluyen cítricos, melocotones, fresas, kiwi, alcachofas y papas.
Los suplementos dietéticos o medicamentos recetados, tales como los llamados gluconatos de hierro son otra forma de aumentar los niveles de hierro en el cuerpo. Estos medicamentos deben ser tomados solamente bajo prescripción médica, ya que los efectos secundarios pueden ser potencialmente graves.
Cuidado especial para mujeres embarazadas
Las mujeres embarazadas están especialmente en riesgo de padecer anemia por deficiencia de hierro. Esto se debe a que el hierro adicional necesitado por el feto y el cuerpo materno puede agotar rápidamente los niveles de hierro.
Las mujeres embarazadas deberían recibir un análisis de sangre precoz para controlar sus niveles de hemoglobina. Los niveles bajos de hierro pueden ser recetados con suplementos dietéticos y/o cambios en la dieta y los huéspedes deben controlar estrictamente su alimentación.
Circunstancias en que hay un incremento en el riesgo de anemia por deficiencia de hierro
Ciertos factores incrementan el riesgo de sufrir anemia por deficiencia de hierro. Esto incluye la malnutrición crónica, el embarazo múltiple, la lactancia a término, la pérdida de sangre excesiva y la variada condiciones crónicas que impiden la absorción de nutrientes.
También hay varios grupos de personas que están especialmente en riesgo de anemia por deficiencia de hierro. Estos incluyen los recién nacidos, los niños en edad preescolar, los adolescentes en crecimiento, las mujeres embarazadas, los adultos mayores, las personas que están en dietas vegetarianas o veganas y las personas que tienen anemia Falciforme.
Tratamiento de la anemia por deficiencia de hierro
El tratamiento de la anemia por deficiencia de hierro depende de su gravedad. Las personas con una anemia leve aceptablemente pueden ser tratadas con cambios en la dieta, suplementos dietéticos y/o medicamentos recetados.
Las personas con anemia severa relevante necesitan una transfusión de sangre para restablecer los niveles de hierro. Esta es una práctica relativamente segura, pero puede tener algunos efectos secundarios y el riesgo de reacción adversa.
Cuando la anemia es causada por una condición crónica tales como la enfermedad celíaca, entonces los tratamientos deben concentrarse en tratar la causa subyacente de la anemia. Si los tratamientos no son efectivos entonces pueden ser necesarias transfusiones sanguíneas o tratamientos con hematopoyesis extracorpórea.
Conclusiones
La anemia por deficiencia de hierro es un trastorno común con una variedad de efectos negativos sobre la salud. Los factores de riesgo pueden incluir dietas deficientes en hierro, pérdida de sangre excesiva, y una variedad de condiciones crónicas que impiden la absorción de nutrientes.