La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por la elevación de los niveles de glucosa en la sangre. Esto provoca un déficit en la producción de insulina, hormona que regula los niveles de glucosa en el cuerpo humano y es aquí donde aparecen las nueces. Las nueces son semillas pequeñas, oleaginosas y nutritivas que provienen de varias especies de árboles de la familia Juglandácea. Se trata de un alimento ideal para una alimentación saludable y, se ha demostrado que su consumo aporta numerosos beneficios a los diabéticos.
Los diabéticos están sujetos a un mayor riesgo de sufrir consecuencias graves relacionadas con la diabetes, tales como enfermedades cardiovasculares, así como enfermedades renales y oculares. Por esta razón, los médicos recomiendan una alimentación equilibrada para controlar los niveles de glucemia. Entre los alimentos nutritivos que se recomiendan para controlar la diabetes destacan las nueces.
Índice
Alimento digestivo saludable
Las nueces son ricas en fibra, un componente fundamental para una dieta saludable. Las fibras solubles, que se encuentran principalmente en la cáscara de las nueces, aumentan la consistencia y volumen de las heces, y, por lo tanto, contribuyen a mejorar la digestión y a prevenir el estreñimiento. Esta característica contribuye a mejorar la digestión y facilita la absorción de nutrientes importantes para el cuerpo.
También son excelentes fuentes de proteínas vegetales. Estas proteínas son esenciales para el bienestar general de un diabético. La proteína es fundamental para el crecimiento y mantenimiento de los órganos, tejidos, huesos y músculos. Por otro lado, los diabéticos que se alimentan de proteínas vegetales tienen una menor incidencia de enfermedades relacionadas con la diabetes, como el síndrome metabólico.
Prevenir los trastornos de los lípidos
Otro motivo que hace que las nueces sean un alimento ideal para los diabéticos es que contienen ácidos grasos poliinsaturados. Estas grasas son importantes para mantener el equilibrio de los lípidos en la sangre. Los niveles elevados de lípidos en la sangre son un marcador de riesgo en muchas enfermedades cardiovasculares.
Estudios científicos han demostrado que, los ácidos grasos en las nueces pueden reducir significativamente el colesterol y los triglicéridos en la sangre. Esto hace que el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y otros trastornos relacionados con la diabetes sea mucho menor.
Útiles para bajar de peso
En los diabéticos, el sobrepeso es un gran problema. El sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de desarrollar diabetes, especialmente de tipo 2. Las nueces contienen propiedades que ayudan a prevenir el sobrepeso. Estudios científicos han demostrado que las nueces contienen nutrientes que ayudan a controlar el peso corporal, como aceite de linaza y ácidos grasos poliinsaturados.
Además, la fibra en las nueces también ayuda a controlar el apetito, aumentando los niveles de saciedad durante mucho tiempo, por lo que el diabético tendrá menos ánimos de comer a deshoras o de excederse en las faltas alimenticias.
Ricas en vitaminas y minerales
Las nueces también son ricas en vitaminas y minerales. Contienen vitamina K, riboflavina, ácido fólico, tiamina, zinc, hierro, potasio, magnesio y fósforo. Estas vitaminas y minerales son esenciales para el correcto funcionamiento de los órganos y también son importantes para la salud, especialmente para la diabetes.
La vitamina K es importante para la coagulación de la sangre en la diabetes, mientras que el hierro es esencial para la producción de glóbulos rojos y el potasio ayuda a regular la presión arterial. Además, el magnesio contribuye a la producción de energía, así como al buen funcionamiento de los músculos, mientras que el fósforo contribuye a la síntesis de proteínas.
Ricas en antioxidantes beneficiosos
Las nueces también son ricas en antioxidantes, como la vitamina E, que ayudan a prevenir el daño oxidativo de las células producido por los radicales libres. Estos radicales libres están presentes en la sangre y se producen cuando el organismo metaboliza los alimentos. Estos radicales libres afectan, negativamente a, las células y contribuyen a numerosas enfermedades crónicas, como la diabetes.
Además, las nueces contienen muchos otros antioxidantes, como las punicolesas, que también ayudan a reducir el daño oxidativo a las células. Estos compuestos también ayudan a controlar el nivel de glucemia en la sangre y contribuyen a prevenir enfermedades cardiovasculares relacionadas con la diabetes.
Estabilizar los niveles de glúcidos en sangre
Las nueces también ayudan a estabilizar los niveles de glucemia en la sangre, gracias a su contenido en ácidos grasos poliinsaturados. Estas grasas impiden que los niveles de glucosa suban rápidamente, y, por lo tanto, contribuyen a proporcionar una sensación de satisfacción durante largo tiempo. Esto ayuda a evitar las picaduras de hambre que, en muchos casos, incitan a los diabéticos a comer alimentos no recomendables, lo que afecta negativamente el control de los niveles de glucemia.
Es importante saber cómo consumir las nueces para obtener el máximo de beneficios. Por lo general, se recomienda un consumo diario de hasta 1 onza de nueces para obtener los beneficios deseados. Esto equivale a unos tres puñados, ya que cada puñado contiene aproximadamente 1/3 de onza de nueces.
Además, es importante comprar siempre nueces desecadas, llevar un control estricto del consumo y no abusar de su consumo. Las nueces tienen muchas calorías, por lo que el exceso de consumo puede conducir a un aumento de peso innecesario.
Conclusión: los beneficios de las nueces contra la diabetes
Las nueces son excelentes fuentes de nutrición para los diabéticos, ya que contienen ácidos grasos poliinsaturados, fibra y vitaminas y minerales esenciales para el organismo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el exceso de consumo puede conducir a un aumento de peso.
Por esta razón, se recomienda un consumo de hasta 1 onza de nueces al día para obtener el máximo de beneficios para la salud.