El deporte es mucho más que una práctica recreativa, se ha convertido en un tema de estudio nacional para promover y publicitar la salud. La psicología en el deporte ha ido cobrando importancia cada vez más extendida debido a la relación entre la mente y el rendimiento, que ha permitido descubrir estrategias prácticas para elevar la motivación, la participación y el rendimiento deportivo. La psicología aplicada es un requisito fundamental para conseguir los objetivos tanto personales como colectivos.
Los estudios en el campo de la Psicología del deporte están mucho más allá del intento de explicar cuestiones relacionadas con la habilidad adquirida, se trata de no limitarse únicamente a los conocimientos técnicos, sino a observar como se comportan los deportistas. El campo de la Psicología del deporte involucra la motivación, el comportamiento individual y grupal, las habilidades de rendimiento, la comunicación, la preparación psicológica, el raciocinio y la gestión del tiempo.
La motivación desempeña un papel importante en el rendimiento deportivo
Los estudios sobre psicología del deporte han hecho hincapié en la importancia de la motivación. Se sabe que cuando los deportistas están motivados para entrenar y competir, se refleja de forma directa en su rendimiento. La motivación interna puede influir en la motivación de los deportistas. Esta influencia puede manifestarse en el procesamiento de la información, las expectativas de éxito, la resolución de problemas y la motivación para trabajar en equipo.
Existen dos principales tipos de motivación para el rendimiento deportivo. La motivación interna es aquella que la persona experimenta internamente, mientras que la motivación externa proviene de fuera de la persona, como un entrenador o un programa de entrenamiento. La motivación interna se refiere de manera general a la búsqueda de un nivel de desempeño superior de la persona. Por el contrario, la motivación externa está relacionada con factores externos que puedan impulsar o estimular el rendimiento.
En cualquier caso, ya sea interna o externa, la motivación puede ser un poderoso catalizador en el rendimiento deportivo. Los experimentos han demostrado que la motivación externa puede incrementar el rendimiento, mientras que el alto nivel de rendimiento deportivo está generalmente asociado con la motivación interna. Esto demuestra que la motivación es un factor ineludible en el rendimiento deportivo.