En comparación con enfermedades agudas como una infección viral, lo que desencadena una enfermedad crónica es mucho más complejo y se desarrolla a lo largo del tiempo. Sin embargo, hay algunas cosas que podemos hacer para ayudar a prevenirlas. Una buena nutrición es esencial para la inmunidad y la prevención de enfermedades crónicas. Esto significa que una alimentación equilibrada basada en alimentos naturales es clave para mantener una salud óptima.
Desde una saludable alimentación hasta algunos cambios de estilo de vida más específicos, estos consejos de prevención ayudarán a prevenir enfermedades crónicas.
Nutrición saludable
La nutrición saludable es la base de una buena salud. Una variedad de alimentos naturales como frutas, verduras, granos enteros, carnes magras, productos lácteos bajos en grasa y aceites saludables son parte importante de una dieta equilibrada. Los alimentos ricos en antioxidantes como las bayas, el té verde y la cúrcuma contienen importantes nutrientes que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico.
Es importante limitar la ingesta de alimentos procesados, alimentos hasta ahora poco saludables, grasas saturadas y dulces, ya que estos tipos de alimentos contienen ingredientes poco saludables y una cantidad excesiva de grasas y calorías.
Incluir alimentos ricos en fibra también puede ayudar a prevenir enfermedades crónicas. Los alimentos ricos en fibra como la avena, las lentejas, las nueces, las frutas y los vegetales promueven la salud general del sistema digestivo y ayudan a reducir el colesterol.