Verano, sol, calor: los gatos nunca se cansan. Sin embargo, también necesitan enfriarse regularmente. Con nuestros consejos podrás hacer más llevadero el calor para tu gato. A los gatos les encanta la temporada de calor, holgazanear al sol y dormitar en un lugar sombreado. Para que tu gato pueda disfrutar del verano ileso, ¡definitivamente debes seguir estos consejos para evitar que tu gato pase calor en verano!
Por qué es importante proteger al gato del calor en verano
Es muy importante proteger a los gatos del calor en verano, ya que los gatos son muy sensibles al calor y pueden sufrir de un golpe de calor, enfermedades relacionadas con el calor o deshidratación.
Además, los gatos no sudan como los humanos y dependen de la respiración para mantenerse frescos, lo que los hace aún más vulnerables a las altas temperaturas. Aquí hay algunas razones específicas por las que es importante proteger a los gatos del calor en verano:
- El golpe de calor: El golpe de calor es una enfermedad potencialmente mortal que puede ocurrir cuando un gato se expone a temperaturas extremadamente altas durante un período prolongado de tiempo. Los síntomas del golpe de calor incluyen jadeo excesivo, respiración rápida y superficial, letargo, enrojecimiento de las encías y la lengua, vómitos y diarrea.
- Deshidratación: Los gatos pueden deshidratarse rápidamente en temperaturas elevadas, lo que puede provocar enfermedades más graves. Los signos de deshidratación en los gatos incluyen piel pegajosa, boca seca, letargo y pérdida de apetito.
- Piel quemada por el sol: Los gatos de piel clara pueden quemarse con el sol igual que los humanos, lo que puede provocar ampollas, dolor e incluso cáncer de piel. Por este motivo es importante evitar exponerlos al sol directo durante las horas centrales del día para evitar problemas de este tipo.
- Estrés térmico: Además de los problemas de salud, el calor también puede causar estrés en los gatos, lo que puede afectar su comportamiento. Los gatos estresados pueden presentar agresividad, irritabilidad y comportamiento destructivo.
Para proteger a los gatos del calor en verano, se recomienda proporcionar un lugar fresco en el hogar o sombreado fuera de casa y mantenerlos hidratados mediante el suministro de suficiente agua fresca.
Los abanicos pueden ayudar a refrescar el ambiente en el que vive tu gato y además se puede cepillar su pelo para ayudar a que circule el aire y esto les ayude a mantenerse frescos.
También se recomienda evitar los paseos en las horas de más calor y afectar una alimentación adecuada para tu gato durante el verano para evitar problemas de salud y mantener su bienestar en todo momento.