Una dieta sana y equilibrada es importante en todas las etapas de la vida y puede tener un efecto positivo en la salud, sobre todo en las personas mayores. Las comidas tienen una gran importancia social, especialmente en la vejez, ya que estructuran el día y aseguran el disfrute, la alegría y el espíritu de comunidad.
Además, una dieta adecuada puede reducir la susceptibilidad a enfermedades en las personas mayores. Sin embargo, a medida que envejecemos, hay muchos cambios en el cuerpo que dificultan obtener un suministro de varios nutrientes y pueden estropear suficiente el placer de comer.
¿Cómo funciona el proceso de envejecimiento?
El proceso de envejecimiento de cada persona es individual. Las personas mayores de 65 años se consideran adultos mayores y se clasifican de la siguiente manera:
- 65 a 74 años: Jubilados jóvenes activos
- 75 a 89 años: Viejos y muy viejos
- 90 a 99 años: Muy viejo
- 100 años: Longevos, centenarios
El grupo 65 plus también es muy diferente en cuanto al estado de salud, la independencia y la posible necesidad de cuidados. Una dieta equilibrada y la selección de alimentos con una alta densidad de nutrientes son especialmente importantes para este grupo de edad.