Cuando se ama a los animales, difícilmente se pueda tener solamente uno; y es por esta razón que si tienes un perro, seguramente en algún momento te plantearás la posibilidad de llevar uno más a casa para que le haga compañía al que ya tienes, o porque, simplemente, no pudiste evitar derretirte de ternura ante un cachorro que también deseas llevar a casa.
Pues bien, para lograr que la introducción al hogar del nuevo miembro de la familia se dé de manera armoniosa, es recomendable seguir algunas recomendaciones. Comencemos por lo más básico, escoge bien al nuevo perro.
Comienza por escoger a un perro que se parezca al que ya tienes
Uno de los errores más frecuentes al llevar a un nuevo perro a casa, es hacerlo bajo el impulso de conseguir un ejemplar que a todas luces parece perfecto, pero que no se parece al can que ya tienes en casa. Si tienes un perro muy viejo y tranquilo en casa, evita llevar uno que sea muy activo o intranquilo.
Un perro viejo se puede estresar fácilmente si llevas a casa a un perro excesivamente activo que no respete límites y no lo deje en paz. Si bien, no se trata de evitar adoptar a un cachorro, si debes buscar al menos a uno de personalidad tranquila. Emparejando las personalidades, aumentas la probabilidad de éxito a corto plazo.