Los suplementos de proteínas se han convertido en una moda creciente entre quienes desean aumentar la masa muscular o bajar de peso mientras fortalecen su musculatura. Si bien, estos productos son comercializados de manera libre y prometen los mejores resultados para quien los consume, no todo lo que brilla es oro, y excederte con su consumo, puede llegar a ser perjudicial para la salud.
Si consumes suplementos de proteínas o piensas hacerlo, quédate a conocer todo lo que necesitas saber al respecto.
¿Qué contienen los suplementos de proteínas?
En el mercado podrás encontrar diferentes tipos de suplementos de proteínas; y el que se ajuste a tus necesidades puede variar entre unos y otros; es por esto que, si bien, se pueden adquirir de manera libre, lo más recomendable es que sean prescritos por un especialista en nutrición y dietética.
La mayoría de estos suplementos, prometen estar llenos de proteínas saludables, pero en realidad, además de estas, suelen tener otros componentes. Por lo general, las proteínas provienen de fuentes vegetales como la soja, patatas, guisantes o arroz, aunque también los hay de origen animal, tales como los de leche o huevo, siendo el de suero de leche uno de los más consumidos, siendo conocido como whey protein.
Además de contener proteínas, los polvos proteicos contienen en su composición: azúcares, espesantes, vitaminas y minerales, saborizantes, entre otros elementos que pueden variar de marca en marca.