Las grietas y resequedad en los talones de los pies, son muy desagradables, pueden denotar dejadez y falta de cuidado personal. El cuidado personal es muy importante para mantener una buena autoestima, ayuda a una mejor estética y los pies no deben escapar de esos cuidados.
Muchas veces, el uso de zapatos o sandalias puede hacer que los talones se resequen y se produzcan agrietamientos de la piel; incluso, se llega a formar una especie de callosidad que es difícil de recuperar si pasa mucho tiempo en esas condiciones. Además de usar un determinado tipo de calzado, la deshidratación también puede causar esas grietas.
¿Qué causa que los talones se endurezcan?
Existe una gran variedad de factores que ayudan a la formación de piel dura y reseca en esa zona del cuerpo; sin embargo, las principales causas son el sobrepeso y el uso de zapatos inadecuados como las sandalias, ya que estas exponen el talón y este comienza a perder la grasa natural que le protege.
Otros de los factores es permanecer mucho tiempo de pie, no tomar suficiente agua, usar zapatos de suela dura o padecer algún tipo de afección en la piel como hongos, tiña, pie de atleta, entre otros.