Un poco de agua, la pastilla que necesitas para eliminar ese brutal dolor de cabeza que te atormenta y listo. Así de sencillo parece ser tomar un medicamento en tableta y esperar que el mismo surta efecto.
Sin embargo, médicos, enfermeros y personal de salud, últimamente han estado al tanto de algunos resultados de investigaciones que aconsejan cuál es la forma correcta de tomar una pastilla. Son muchas las razones que inciden en que el medicamento haga el efecto esperado, y aquí te las vamos a compartir.
Inyección y pastilla, ¿cuál es la mejor alternativa?
Si nos vamos a los efectos a corto plazo, una inyección será siempre una opción más rápida y efectiva que ingerir una pastilla para una dolencia particular. Especialmente en casos de inflamaciones y dolor, las inyecciones juegan un papel importante debido a que pasan de manera directa al torrente sanguíneo.
Sin embargo, por diferentes razones, no en todos los casos es posible administrar de manera subcutánea o intravenosa los medicamentos, razón por la cual la administración de los mismos de forma oral es la más popular, pero el efecto, además de tardar más en hacer su trabajo, suele conseguir algunos obstáculos en el camino que hasta ahora pasaban desapercibidos.
