Nuestros perros expresan algunos comportamientos naturales de la especie que, para nosotros los humanos, pueden no tener mucho sentido. Uno de estos comportamientos es el acto de rascarse con demasiada frecuencia. A veces, sin razón aparente, el peludo empieza a rascarse y pronto deja de hacerlo. Sin embargo, hay casos en los que el picor en los perros puede significar un problema más grave y necesitar la intervención de un veterinario.
1) Las pulgas y garrapatas provocan mucho picor en el animal
Las pulgas y garrapatas provocan mucho picor en el animal y, dependiendo de la gravedad de la infestación, pueden llegar a causar heridas en el cuerpo del animal. La pulga del perro deposita su saliva en el pelo del animal, por lo que es importante realizar la intervención inmediata para evitar problemas mayores. La garrapata en el perro es perjudicial no sólo por el picor, sino también por la adherencia al animal: el parásito es capaz de disminuir la inmunidad del cachorro y también el número de plaquetas cuestiones relacionadas con la enfermedad de la garrapata.
2) Sarna: enfermedad que provoca la pérdida de pelo en el cuerpo
La sarna en los perros se transmite a través de los ácaros. Esta enfermedad deja al perro con picores y pérdida de pelo, provocando heridas por todo el cuerpo y un gran inconveniente para el peludo. Cuando notes que tu perro se rasca demasiado y que se le cae el pelo, acude al veterinario. Probablemente necesitará medicación y productos específicos para la hora del baño, como champús y jabones medicados.
3) Otitis: los perros pueden verse afectados por la infección muy fácilmente
La otitis canina es una enfermedad que molesta mucho a los perros. Al ser la oreja una zona sensible y muy expuesta, acaba siendo un objetivo para las bacterias, sobre todo cuando no recibe la limpieza ideal con frecuencia. Otro factor que contribuye a la otitis es la entrada de agua en el oído. Por eso, cuando lleves a tu perro a la playa o a otro lugar donde vaya a tener contacto con el agua, es necesario que compruebes que no queda ningún líquido en ella. El momento del baño también requiere algunos cuidados, como el uso de un pequeño trozo de algodón para proteger el lugar.
4) Alergia alimentaria: tu peludo no puede comer cualquier cosa.
Los perros no pueden ir por ahí comiendo cualquier cosa. Aunque este pensamiento es muy común, algunos perros (especialmente los de raza como el Shih Tzu y el Bulldog) son propensos a las alergias alimentarias. Puede ser a cualquier alimento, incluso a las proteínas como el pollo. Por lo tanto, es importante vigilar siempre lo que come tu peludo. Si hace una alimentación natural, lleve a su perro a una prueba de alergia antes de empezar la dieta. E investiga de antemano cuáles son las verduras y hortalizas que puede comer tu cachorro.
5) Dermatitis atópica: ¡una enfermedad hereditaria que requiere atención!
La dermatitis atópica canina es una enfermedad hereditaria, que se manifiesta cuando el perro tiene contacto con el polvo, los ácaros e incluso con productos de limpieza más fuertes. Se considera una alergia canina grave, porque provoca mucha irritación en la piel además de llevar al perro a buscar lugares para rascarse y aliviar esa molestia. Las llagas del perro pueden ser causadas por este rascado excesivo. Las heridas no cicatrizadas pueden evolucionar hacia infecciones más graves.
6) La seborrea canina provoca mucho picor
La seborrea canina es un problema de endocrinología: se manifiesta cuando hay un problema en las glándulas sebáceas de los perros, responsables de filtrar el sebo de la piel. En el caso de la seborrea, estas glándulas acaban produciendo más sebo del que deberían, provocando que el cuerpo de la mascota se llene de costras, llagas, manchas rojas y, por supuesto, picores. Puede ser una enfermedad de causa hereditaria, pero también puede manifestarse en perros que han tenido algún problema hormonal reciente. Si el problema es, de hecho, hereditario, no hay cura. Pero si es por otro motivo, es posible seguir algún tratamiento. Por lo tanto, sospeche si su perro empieza a rascarse con frecuencia y tiene el cuerpo lleno de manchas rojizas.
7) Plantas
Algunas plantas son tóxicas para los perros. Aunque no tenga contacto con la maceta ni se coma la planta, sólo el olor ya puede causar alergia. Es esta reacción alérgica, pues, la que desencadenará el picor. Por lo tanto, es importante investigar cuáles son las plantas que son tóxicas para los perros antes de ponerlas en su casa.